Estable dentro de su gravedad se encuentra Katherine Collao, la joven madre que fue trasplantada de hígado el lunes pasado tras sufrir una hepatitis fulminante. Tanto ella como su hijo prematuro siguen internados en el Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de la Universidad Católica bajo supervisión profesional.
"Su función hepática ha respondido bien y no ha presentado complicaciones", indica el parte médico liberado este viernes.
El equipo médico señaló estar expectante de la recuperación que la joven tendrá del coma inducido por el edema cerebral que presentó mientras esperaba el órgano donado.
Collao sigue con apoyo ventilatorio y pronóstico reservado.
En tanto, su hijo Emilio -que nació prematuro el sábado pasado- se mantiene en estado delicado y conectado a ventilación mecánica para apoyar su función respiratoria.