Cine y gimnasio.
Esas dos actividades se tomaron la ex Penitenciaría de Santiago la noche del viernes, cambiando la rutina de los reclusos.
Así, los internos pudieron utilizar las máquinas de ejercicio y ver la película del comediante Stefan Kramer.
Los presos valoraron la iniciativa, destacando que las actividades los ayudaron a liberar tensiones y cambiar la monótona vida del encierro.
POSITIVO BALANCE
Las máquinas de ejercicio llevan un mes instaladas en la cárcel, periodo en el cual -según Gendarmería- se han producido positivos cambios al interior del recinto.
A modo de ejemplo, explicaron que en diciembre del 2011 se habían producido 130 eventos críticos, los que el 2012 bajaron a 24.