Seguro le suenan los Fantasmas, los Corleone, los Cara de Pelota y los Cara de Chala.
Son bandas criminales que han adoptado curiosos nombres o han sido bautizados con ellos, pero ¿de dónde vienen sus nombres?
De acuerdo al comisario Pedro Muñoz, de la Brigada Antinarcóticos de la Policía de Investigaciones en Valparaíso, las denominaciones que usan las bandas son una suerte de "marca registrada" de sus crímenes o productos.
Los Cara de Chala, por ejemplo, adoptaron su nombre con algunos objetivo: distinguir la droga que traficaban y los lujos que tenían. Los hermanos Jiménez Mesa eran conocidos por su apodo y por sus propiedades y animales.
Los Corleone, por otro lado, traficaban en El Bosque y obtuvieron su sobrenombre por el curioso stencil que pintaban en cada uno de los lugares en que cometían crímenes: una imagen de El Padrino.
Los Fantasmas, en cambio, fueron bautizados por la prensa así ya que asaltaban bancos sin dejar ninguna huella. Entraban a las sucursales, encañoñaban a los guardias, robaban y se iban.
Así son muchos: los Car'e Jarro, el Lauchón, el Perilla.
Para saber más detalles al respecto puedes ver la nota completa:
La historia de los insólitos nombres de las bandas criminales chilenas
La historia de los insólitos nombres de las bandas criminales chilenas
Los Cara de Chala, de Jarro o los Corleone son sólo algunos de los nombres adoptan estos grupos en nuestro país como "una marca registrada" de sus acciones.
Foto: TVN.