No resistieron la lluvia, el agua se filtró en tres de los centros comerciales más grandes de Viña del Mar.
Y fueron los estacionamientos subterráneos el punto más débil, hasta donde escurrió todo, colapsando los sistemas de evacuación de aguas lluvias.
Pero no solo el comercio sufrió, también resultaron anegadas las dependencias de urgencia adulto del Hospital Gustavo Fricke, donde un colector de aguas servidas colapso y se mezcló con la lluvia, en cinco minutos estaban inundadas las salas de emergencia infantil, ginecología y adultos.
Las autoridades del recinto debieron realizar una evacuación vertical trasladando a los pacientes a los pisos superiores.
Una situación similar se vivió en el Hospital de Quilpué, donde dos pabellones de cirugía, aún sin inaugurar, también se inundaron.
La lluvia, que durante una hora de manera ininterrumpida azotó a la ciudad jardín, dejó a 12 vehículos atrapados entre el agua en el estacionamiento de un edificio, sus dueños estimas que las pérdidas son totales.
En Valparaíso el viento y la lluvia no tuvieron piedad con quienes viven en mediaguas tras perder sus casas en el incendio.
Los pobladores trataron de cubrir los techos con nylon, pero la mala construcción de las viviendas facilitó que el agua se filtrara, por lo que al menos tres familias fueron trasladadas a casas de parientes.
Para este jueves se espera otro sistema frontal en la zona central del país.
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