Este viernes comienza la fiscalización a la venta de alcohol en la Comuna de Las Condes en botillerías con "clientes" encubiertos.
La medida se debe a una ordenanza municipal que comenzó a regir este 1 de agosto y que obliga a vendedores de alcohol a solicitarle al cliente un documento que confirme su mayoría de edad, el que puede ser carnet de identidad, pasaporte u otro medio que permita corroborar feacientemente que tiene más de 18 años, según publica El Mercurio.
La fiscalización también incluye a los servicios de delivery como Rappi, Pedidos Ya o Uber Eats, por lo que repartidores también estarán obligados a pedir documento de identificación.
Para evitar la venta de alcohol a menores de edad, sumamos a los actores de venta con el lema "Sin Carnet No". Botillerías, supermercados, minimarkets y delivery deberán exigir la cédula de identidad al vender alcohol. pic.twitter.com/JIma0h3vdb
— Las Condes (@Muni_LasCondes) August 8, 2019
"El repartidor deberá pedir el carnet al momento de la entrega para verificar si quien recibe en el domicilio es mayor de edad", dijo el alcalde Joaquín Lavín.
Si los establecimientos o repartidores no piden este documento se arriesgan a multas que van desde 2 a 5 UTM, es decir entre 147 mil a 245 mil pesos. En caso de que el cliente al que le están vendiendo sea menor de edad la sanción es de 5 UTM.
Para vigilar que esto se cumpla la Municipalidad contará con "clientes" encubiertos, es decir jóvenes de 18 y 19 años que comprarán en diferentes locales para comprobar que la ordenanza se cumpla.
En el marco de la medida, la Municipalidad lanzó una campaña para que los vecinos estén al tanto de la norma y exijan que se cumpla, la que se denominó "Sin carnet no".