Hoy se cumplen 10 años desde que el 10 de febrero de 2007, tras años de presencia de las "micros amarillas" en las calles de la capital, se implementó el Transantiago. Diez años de polémicas, traslados y repeticiones del famoso "¡Bip!", que sonó 57 millones de veces en 2015.
Tras un complicado inicio, el Ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, sostuvo que "los problemas del inicio ya fueron superados, en el sentido de que es un sistema que opera, la gente se moviliza y ahora tenemos desafíos distintos a los de hace 10 años".
Una década después de su inauguración, un pasajero demora en promedio 48,2 minutos por viaje, en buses que se trasladan a un promedio de 20,8 kilómetros por hora en la capital.
A fin de mejorar el servicio y facilitar el acceso a él, desde el año 2009 el Transantiago recibió 5.172 millones de dólares en subsidios, lo cual equivale a más de 3 mil millones de pesos. Con esa cifra, se podrían construir 10 hospitales como el Sótero del Río o dos nuevas líneas de Metro en Santiago.
En medio a esa situación, la evasión sigue siendo uno de los principales problemas del sistema. Durante el tercer trimestre del año pasado, por ejemplo, ese índice llegó a un 28,4% del total de pasajeros.
El ministro Gómez-Lobo reconoce a ese fenómeno como uno de los problemas más graves del Transantiago. "Se está trabajando en un proyecto de ley para enfrentar eso, implementando zonas pagas y trabajando para colocar torniquetes en los buses", señaló.
Sin embargo, el secretario de Estado también destacó los beneficios que trajo el sistema al transporte público capitalino. "El sistema llegó para reemplazar el sistema de micros amarillas, que competían por los pasajeros en la calle. Antes moría una persona atropellada a cada tres días por una micro amarilla", dijo.
A su vez, pese a los numerosos aumentos de precios en el servicio (que pasó de $380 en 2007 a los actuales $640), el jefe de cartera recordó la implementación de la tarifa integrada. "Al principio no había eso, y había gente que evitaba tomar el bus y el metro para no tener que pagar dos veces", sostuvo.
A futuro, también se espera la construcción de más corredores de buses en la ciudad. "Estamos trabajando en un plan que considera, por ejemplo, a la avenida Vicuña Mackenna", sostuvo.