En las grandes urbes, el atochamiento vehicular parecía ser el espacio de “tiempo muerto” más convencional, en el trayecto que se da entre el hogar y el lugar de trabajo. Los autobuses, las micros y el metro se suman naturalmente a ese “punto de espera”, pero nadie pensó que los ascensores se unirían para extender el trayecto entre la casa y el trabajo.
Según un Estudio de Satisfacción de Operadores realizado por el Directorio de Transporte Público Metropolitano en 2017, las personas pasarían en promedio 15 días al año movilizándose en metro o bus del Transantiago. A ello hoy se suma el trayecto mensual arriba de un ascensor.
Chile cuenta con los edificios más altos de América Latina, y van desde los 20 a los 55 y 60 pisos de altura (En el caso de Portada Titanium y Costanera Center Torre II respectivamente). Así es como los ascensores se convirtieron en un espacio de “punto de espera” muy recurrente. Y en un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, un lugar de espera, se ha convertido en el espacio propicio para desarrollar un medio de comunicación.
Tiempos de espera y nuevos medios de comunicación
Ciertamente los medios han evolucionado. Hoy día existe una comunicación dirigida especialmente a los intereses de cada usuario, a través de internet y el uso de los smartphones. Pero en el ámbito público, donde conviven los intereses comunes, también han aparecido nuevos medios que se han instalado especialmente en los puntos de espera. Con ello surgieron nuevas posibilidades de dirigir los mensajes a un público de nicho representado por el área ejecutiva en tiempo real.
Con el metro, por ejemplo, surgió la necesidad de crear un medio de comunicación para anunciar noticias y alimentar el tiempo de tránsito de los usuarios. Así se dio vida a un canal de circuito cerrado de TV en las estaciones de metro.
Ahora se suma el caso de los ascensores de edificios de oficina, donde hoy día existe nueva plataforma digital de pantallas con transmisión en línea.
El proyecto proviene de países como Brasil, donde se ha implementado en diversas ciudades, hoy más de 85% ya utilizan la tecnología en transmisión. En Chile, va en 11% y en fuerte aumento.
A nuestro país llegó el año 2017 bajo el nombre de InMedia - Soluciones Digitales Ltda., y tras un estudio de mercado realizado, detectaron que las personas que trabajan en estos edificios, como promedio pasan más de una hora y media al mes en los ascensores, transformándolo en uno de los medios de transporte más utilizados.
La iniciativa en nuestro país partió con un piloto de 8 pantallas en el edificio Parque Araucano en la zona de Nueva Las Condes, y ya cuenta con más de 200 pantallas en 40 edificios de gran altura, que capturan la atención de 2 mil personas diarias por edificio.
Alberto Horn, gerente general de InMedia, señala que “la idea, surgió debido a que los ascensores son un punto de espera, dentro del cual, sus ocupantes entregan su máxima atención, dando origen a un canal de comunicación, muy potente, que antes no existía”.
El uso de estas pantallas como medio de comunicación ha despertado el interés de organismos públicos, como Onemi y Unicef. Onemi, por ejemplo, ha establecido un sistema de seguridad y prevención para la comunidad. De esta manera el sistema estará constantemente difundiendo recomendaciones frente a una emergencia, en edificios de oficinas con altos flujos de personas. Además, ha llamado la atención de las agencias de publicidad y grandes marcas y ya se encuentran probando el alcance y asertividad de este medio.