Como un "posible caso sospechoso de ébola", categorizó la ministra de Salud, Helia Molina, la situación del ciudadano chileno J.G.F., de 54 años, quien llegó al Hospital Barros Luco con un cuadro febril.
Según la titular de Salud, el afectado no presentaría los síntomas del virus, sin embargo, "debido a la importancia que se le ha dado en el mundo" se ha calificado esta situación como "un probable caso sospechoso de ébola".
En resumen, la ministra Molina señaló que el ciudadano chileno presenta "sólo un cuadro febril en paciente malárico". Agregó, además, que la malaria es una enfermedad recurrente y que su virus no se contagia vía aérea.
"No hay ninguna situación de riesgo para el personal que ha atendido al paciente", señaló la ministra Molina y fue enfática en afirmar que "este no es un caso de ébola, ni siquiera sospechoso".
El recinto hospitalario seguirá funcionando normalmente y que "no se suspenderá ninguna operación" en el Hospital Barros Luco.