Este jueves el ministro de Salud, Jaime Mañalich anunció que seis regiones y dos provincias se encuentran bajo alerta sanitaria debido al "explosivo aumento de la demanda de servicios de urgencias" vinculados a traumas. La medida busca hacer frente a los cerca de 10 mil casos por sobre las que se atienden en un año normal en esta época.
Las regiones con alerta sanitaria son la deTarapacá, Antofagasta, Valparaíso, Maule, Metropolitana y la Araucanía, además de las provincias de Concepción y Llanquihue.
En esa misma línea el ministro detalló que en el último mes se han atendido más de 200 personas con trauma ocular en el servicio público, agregando que "necesitamos un plan ejecutado por el Gobierno para garantizar que más allá de las canastas habituales, van a estar disponibles todas las cirugías, todos los lentes intraoculares, todas las prótesis orbitales, todo lo que se necesite para responder a este aumento de la necesidad".
Esta alerta sanitaria está definida hasta el 1 de diciembre próximo y autoriza a la compra de servicios para el transporte aéreo y terrestre para el traslado de personas, contratación extraordinaria de personal, reconversión de camas en el sector público, coordinación con otros servicios, además de aumentar los controles de las fuentes de agua potable y sistema de alcantarillado.
También se permite la adquisición de equipamiento sin necesidad de recurrir a licitaciones en el Mercado Público,realizando un trato directo independiente, el cual se deberá dar cuenta con posterioridad a la Contraloría, sumado al pago de hora extras.
Además el ministro detalló que se pueden volver a contratar exfuncionarios que hayan dejado de servir recientemente en el servicio público de salud a pesar de la cláusula en la que se hayan acogido, tal como lo es el beneficio del incentivo al retiro que les prohíbe ser recontratados por el sistema público en más de 5 años.
En esa misma línea, el ministro Mañalich también se refirió a la paralización de los recolectores de basura que afecta a a la Región Metropolitana, calificándolo como un "riesgo de extraordinaria gravedad para la salud pública", agregando que "esta alerta sanitaria, por su puesto que se hace cargo también de esa situación en el sentido de que el ministerio o la Seremi de Salud puede disponer de recursos y mecanismos extraordinarios para facilitar la extracción de basura".