Despertaron con -1,5 grados en Chillán y sin la posibilidad de prender las estufas, debido a la emergencia ambiental.
El problema es que el sistema de pronóstico de calidad del aire presentó un error y arrojó por cuarto día consecutivo un alto nivel de material particulado en el aire. Sólo el viernes las cifras fueron acertadas.
Muchas personas y locales quedaron sin la posibilidad de encender sus calefactores a leña, provocando no sólo la búsqueda de alternativas para soportar las bajas temperaturas, sino consecuencias económicas.
Revisa los detalles en la nota de 24 Horas Central.
Foto: Agencia Uno / Referencial