A las 06.15 horas del 12 de agosto de 2014 un grupo de sujetos vestidos con overoles y liderados por Alex Niñoles Rivas asaltó un camión de valores de la empresa Brinks en la losa del aeropuerto Arturo Merino Benítez de Pudahuel, tras intimidar con armas de fuego a sus vigilantes, logrando apoderarse de un botín de 19 sacos con un total de 6 mil millones de pesos, cuyo destino era la ciudad de Copiapó, en un caso que fue denominado “El Robo del Siglo”.
El 30 de octubre la Fiscalía Regional Metropolitana Occidente designó un equipo de fiscales con dedicación preferente a los delitos relacionados con robos a camiones de transporte de valores y mediante un trabajo coordinado con personal especializado del OS-9 de Carabineros, en enero se lograron las primeras detenciones en las regiones Metropolitana y del Biobío y seis de los presuntos involucrados fueron formalizados.
El 10 de abril se concretó un procedimiento abreviado en el Primer Juzgado de Garantía de Santiago, condenándose a Marcelo Moya Flores como autor del delito de robo con intimidación, en grado consumado y aplicándose contra él una pena de tres años y un día de presidio bajo el régimen de libertad vigilada intensiva. Según los antecedentes de la acusación sostenida por la Fiscalía, el sujeto facilitó a los autores del atraco el vehículo usado en el delito, que era de su propiedad.
El 21 de abril se formalizó a un séptimo implicado, que habría proporcionado las armas a la banda de Niñoles, quien se hacía llamar La Leyenda de Quilicura.
El 12 de mayo fue formalizado el segundo cabecilla, Francisco Morales, quien habría planificado cada detalle de la operación, recopilado datos sobre la seguridad en el aeropuerto, reclutado a los participantes y asignado las tareas específicas. El sujeto pasó por Brasil y Argentina después del atraco y arrendaba un departamento en un apart hotel del sector de Manuel Montt, en Providencia.
Compraba empanadas y pan en el Barrio Italia cuando fue detenido. El sujeto pensaba cambiar su rostro en Europa y adquirir una nueva identidad, pero su mujer lo hizo volver a Santiago y terminó siendo apresado.
A las 09.00 horas de este martes se dio inicio a la preparación de juicio oral en un proceso en que los imputados arriesgan penas de cárcel efectiva superiores a los 15 años.
Se estima que se ha podido recuperar solo el 10% de lo sustraído. Hay dos integrantes del grupo que aún no se ha podido detener y permanecen prófugos. Entre ellos Kevin Olguín Sepúlveda, quien actuó como apoyo del grupo que concretó el robo y habría conducido un vehículo que se usó para despejar accesos y facilitar la huída. Su rastro en redes sociales habla de una vida de lujos en Italia.
Fuente y foto: Agencia Uno