Luego de más de 40 horas sobre una de las chimeneas de la termoeléctrica Bocamina II propiedad de Endesa, en la comuna de Coronel, los pobladores decidieron poner fin a su manifestación.
Los trabajadores César Cabrales, Richard Beltrán y Marcos Ramírez llevaban casi dos días a más de 60 metros de altura, soportando temperaturas que llegaron a los cero grados buscando ser escuchados ya que piden una indemnización por parte de la empresa ya que la contaminación estaría afectando a su fuente laboral y los habitantes de la población Aroldo Figueroa también exigen compensaciones y su erradicación.
Los pobladores consiguieron en horas de la tarde de este miércoles un acuerdo con la empresa, el que consiste en la erradicación de la población del sector y una compensación que supera los 900 millones de pesos, propuesta inicial de Endesa para frenar la protesta.
La negociación fue respaldada por el gobernador de Concepción, Alejandro Reyes y por el senador, Alejandro Navarro, quien sellará el acuerdo con su firma el próximo día viernes.