El Intendente Metropolitano, Claudio Orrego, junto a otras autoridades encabezó la ceremonia de reposición de la imagen de la Virgen en la parte alta del frontis de la Catedral.
Como consecuencia del terremoto de febrero de 2010, y por el riesgo de caída y seguridad, dicha imagen tuvo que ser retirada con la finalidad de ser restaurada por los daños que sufrió.
El Intendente señaló que “este es un hito importante de la restauración patrimonial de la principal Iglesia de nuestra ciudad, que es la Catedral Metropolitana. De alguna manera esta puesta en la cima de la Virgen marca el fin de una etapa de las obras que concluyen el 21 de mayo del próximo año”.
Los trabajos de conservación tuvieron una duración de dos meses y consistieron en limpiezas en seco, húmedas y químicas, que permitieron eliminar la corrosión sin dañar el material original.
La estatua de la Virgen es de cobre y bronce, mide 4,30 metros de altura y pesa 300 kilogramos.
El Cardenal Ezzati que también se encontraba en el lugar afirmó que “la Catedral sigue siendo -dentro del corazón de la ciudad- un signo no solamente de tipo espiritual sino también un aporte a la cultura del país y de la ciudad".
Por su parte, la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, señaló que "la Catedral de Santiago empieza a mostrar su rostro como siempre lo debimos haber visto. Esta restauración empieza a dar sus primeras señales después de tanto tiempo esperando".
La inversión total de estas obras, tanto de conservación como de restauración, implicaron un monto total cercano a los 3 mil 637 millones de pesos, los que fueron aportados por el Gobierno Regional.