El secuestro de un ejecutivo bancario ocurrido la tarde de ayer en Santiago centro, habría sido un ajuste de cuentas. Así se desprende de las primeras investigaciones del hecho y de las declaraciones que dieron los cuatro detenidos por el hecho.
Según declararon los mismos, el ejecutivo bancario había acordado con dos de ellos gestionar un crédito por $100 millones de pesos, pero pronto descubrieron que no había gestión alguna.
Habrían llegado a Arque por ser un contacto para conseguir que el banco otorgara créditos y cuentas corrientes, pese a que no calificaban para ello.
El Banco Santander, emitió este martes un comunicado, "se encuentra recabando antecedentes del caso, para hacerse parte de las investigaciones y recursos judiciales que sean necesarios”, y sostuvo que él "no es ejecutivo de venta del banco, ni ha estado ligado anteriormente a la fuerza laboral", publica el vespertino La Segunda.
Según la entidad, Arque trabajaba para una empresa externa que presta servicios de captación de clientes al banco.
El extraño caso quedó al descubierto la tarde de ayer lunes, luego de que Arque fuera secuestrado por tres sujetos en el centro de Santiago.
La historia había comenzado un par de semanas antes, cuando la esposa de uno de los detenidos acudió a la sucursal del Banco Santander de calle Matías Cousiño, para obtener un crédito hipotecario.
En esa oportunidad, contactó a Nicolás Andrés Arques Sandoval, de 27 años, con quien llegó a un acuerdo informal para lograr la gestión vía pago de dos cuotas de un millón 750 mil pesos.
La mujer y su pareja habrían cancelado la primera cuota, y la tarde de ayer -supuestamente- iban a pagar la segunda. Para eso concertaron un encuentro con Arque a eso de las 18.30 horas en las afueras de la sucursal con el ejecutivo, pero la pareja –enterada que Arque no había hecho nada- en realidad tenía otros planes.
Bajo amenaza de arma de fuego subieron a Arque a un automóvil conducido por un tercero para transitar con él por distintas zonas de Santiago.
El ‘secuestro express’ duró aproximadamente dos horas, hasta que la víctima logró zafarse de las amarras en sus manos y tomar una de las armas de sus captores y obligarlos a que lo dejaran ir. Arque se bajó del vehículo en la población La Castrina, comuna de La Granja, donde pidió ayuda a vecinos.
Los individuos huyeron del lugar, pero dos de ellos fueron detenidos.
Pero mientras eso ocurría, familiares de los secuestradores habían llegado a la casa de éste para amenazar a sus familiares.
Carabineros, alertados de lo sucedido, acudió al domicilio donde lograron detener a dos de los involucrados, aunque otros tres lograron huir.
En total cuatro personas fueron detenidas por este extraño caso: dos de los secuestradores, identificados como Juan José Salinas Torres, de 32 años, y Javier Antonio Alfaro Williams, de 20.
Los otros dos detenidos son los que intimidaron a la familia del secuestrado en la comuna de San Bernardo, ambos fueron identificados como Jaqueline Alejandra Diaz Araneda y José Horacio Cerda Duarte, ambos de 32 años.
Los detenidos iban a ser formalizados este mismo martes. Además, la víctima del secuestro también podría enfrentar cargos por su participación en el irregular sistema de otorgamiento de créditos bancarios.