En un fallo unánime, los magistrados de la Tercera Sala de la Corte Suprema determinaron que el Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) Metropolitano deberá pagar más de dos millones 900 mil pesos por los daños que sufrieron las llamadas casas Copeva.
Sergio Muñoz, Sonia Araneda, María Eugenia Sandoval, Juan Escobar (suplente) y el abogado integrante Arturo Prado determinaron que este organismo es el responsable de la mala calidad de las viviendas que resultaron inundadas en junio de 1997.
El fallo indica que "el daño antes detallado es una consecuencia directa de la falta de servicio en que incurrió el Serviu Metropolitano, como quiera que si hubiera planificado o normado la construcción de viviendas sociales con materiales de calidad aptos para lluvias, exigiendo a los privados que participaron en la construcción, el respeto irrestricto de tales planes o normas, el daño no se habría materializado".
Los jueces determinaron que el monto de la indemnización se divide en 1.130.000 pesos por concepto de daño emergente y 1.800.000 pesos por daño moral.