La Cámara de Diputados aprobó el jueves el aplazamiento en un año de la puesta en marcha del nuevo sistema de admisión escolar en la región Metropolitana, luego de la recomendación recibida por parte de la Universidad de Chile.
De acuerdo a la instancia, enmarcada dentro de la Ley de Inclusión, los alumnos ya no tendrán que rendir exámenes para entrar a recintos que reciban aportes del Estado.
En ese punto, la nueva modalidad implica una selección central y aleatoria -llamada "tómbola"- en donde un software define en cuál de las preferencias seleccionadas por la familia quedará el menor de edad.
La decisión legislativa se produjo luego de que el equipo encargado de diseñar el sistema, el Departamento de Ingeniería Civil Industrial de la Universidad de Chile, recomendara aplazar la puesta en marcha en el área metropolitana.
Según los expertos, el cambio debiese ser gradual y empezar con otras regiones grandes, como lo ocurrido con Valparaíso y Concepción.
El objetivo de las autoridades, junto con equiparar la balanza para las familias y alumnos del país, es evitar las grandes aglomeraciones registradas en las puertas de colegios y liceos, en donde apoderados terminaban acampando para buscar una matrícula.