Dos jóvenes anarquistas chilenos fueron acusados de poner una bomba en la Basílica del Pilar de Zaragoza el pasado 2 de octubre.
La Audiencia Nacional juzgará a los dos chilenos, Francisco Solar y Mónica Caballero el próximo martes por varios delitos de terrorismo y la Fiscalía solicitó 44 años de cárcel para cada uno.
La explosión de artefacto dejó a una persona herida, aunque al momento en que detono, 50 turistas norteamericanos se encontraban recorriendo el sitio.
Según la investigación, ambos jóvenes pertenecían a una organización y habrían estado preparando otros ataques como la colocación de una bomba en la Basílica de Montserrat.