La Corte Suprema ratificó este martes la orden de indemnización del Estado de Chile a un ciudadano que perdió un ojo por el impacto de una bomba lacrimógena en la comuna de Peñalolén.
La situación se registró el 29 de marzo de 2009, cuando Mario Aravena Tapia se encontraba en su domicilio en la calle Quebrada El Aromo en la comuna de la capital.
La resolución de la Corte Suprema fue unánime y emanó de la Tercera Sala del tribunal, que determinó la responsabilidad del Estado en las lesiones de Aravena Tapia, quien perdió un ojo y resultó con una fractura trimalar izquierda.
"La causa del daño experimentado por el señor Aravena Arias -y su entorno familiar- se atribuye a la conducta desplegada por efectivos de Carabineros de Chile, al dispararle a corta distancia y hacia su rostro", detalla el fallo en primera instancia, del Tercer Juzgado Civil de Santiago.
La indemnización total alcanza casi 80 millones de pesos: se determinaron $1.583.950 por daño emergente, $30.000.000 por lucro cesante y $40.000.000 por daño moral.
Además, se dispuso el pago de $2.000.000 al cónyuge de Aravena y a cada uno de sus tres hijos.
Foto: Agencia Uno.