Gendarmería sancionó a 13 funcionarios que el año pasaron participaron en una golpiza a cerca de 50 reos de la cárcel de Calama, supuestamente por un motín, según apuntó la propia institución.
En declaraciones con la prensa, el coronel Pedro Villarroel apuntó que de los 14 inculpados, 13 han sido sancionados: algunos de ellos con suspensión de actividades y otros con la disminución del 70% de sus sueldo. "La dirección de Antofagasta dispuso un sumario administrativo cuya resolución llegó el 30 de septiembre de este año", puntualizó el oficial.
La golpiza se produjo el domingo 29 de julio de 2013, día de visitas en la cárcel, por lo que se encontraban familiares dentro de la prisión. En este sentido, el sargento Héctor García afirmó que "queríamos evitar otro San Miguel (en referencia al incendio de 2010 en la cárcel de San Miguel en el que murieron 81 personas), había civiles dentro y menores de edad. No queremos justificar los excesos, pero la Gendarmería de Chile no ampara esta situación y los colegas ya están drásticamente sancionados".
En defensa de los presos, la Seremi de Justicia de Antofagasta, Alejandra Pozo, señaló que "los internos están privados de libertad, no de sus derechos". Pozo aprovechó para comentar que el Ministerio está ampliando la capacitación de la Gendarmería en derechos humanos, para lo que "se ha creado la primera unidad en Rancagua"; unidad que se quiere replicar en Antofagasta.
Los familiares de los reos y las asociaciones defensoras de los derechos humanos han interpuesto un recurso que ha sido aceptado por la Corte de apelaciones para esclarecer los hechos.