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Testigo boliviano afirma que Cangri fue bajado de camioneta apuntado con un arma

Además, afirma que eran cinco las personas las que viajaban en el vehículo el día en que se produjo el deceso de Sebastián Leiva y Germán Gundián.

24Horas.cl Tvn

Viernes 22 de marzo de 2019

Esta semana la policía boliviana detuvo a Narciso Villca Esquivel, ciudadano boliviano que era buscado como uno de los testigos de la desaparición y posterior fallecimiento de Sebastián "Cangri" Leiva y Germán Gundián, cuyos cuerpos fueron hallados el pasado 24 de febrero en el desierto boliviano.

Quien era mencionado en el caso como "Lulú" (aclaró que su apodo en realidad es Chulú) prestó declaración ante la Fiscalía Departamental de Potosí, brindando nuevos y reveladores detalles sobre el caso.

Uno de los puntos claves es que no habrían sido cuatro las personas que se trasladaban en la Toyota 4Runner por un paso no habilitado rumbo a Bolivia desde San Pedro de Atacama, sino cinco.

Según consigna Las Últimas Noticias, Villca asegura que se encontraba en Chile buscando trabajo, pero que, al quedarse sin dinero, contactó a su concuñado quien a la vez lo derivó con un amigo suyo de nombre Alex Díaz, quien podría llevarlo a Bolivia ya que realizaba el viaje entre ambos países a menudo.

El 19 de febrero, Díaz recogió a Villca junto a otros tres hombres, dentro de los cuales se encontraba el hermano de Díaz, quien finalmente fue quien viajó con él, Leiva, Gundián y Sebastián Cornejo (el segundo sobreviviente, quien fue detenido por la PDI la semana pasada).

Es así como "Lulú" afirma que "Cangri" era quien estaba al volante y que Gundián era quien daba las órdenes sobre la ruta a seguir, mientras el viaje estaba marcado por conversaciones sobre armas y drogas.

El momento clave del viaje, según relata Villca, se da cuando, luego de algunos problemas provocados por las lluvias en el camino, Gundián pidió bajarse del auto para orinar, momento en que el hermano de Díaz apuntó con el arma a éste y a los dos chilenos restantes (Leiva y Cornejo), obligándolos a bajarse en medio del desierto.

Por su parte, Villca señala que fue apuntado también para manejar y continuar con el camino a Bolivia, pero que posteriormente, y tras sufrir una persecución por parte de los que iban a comprar la Toyota 4Runner, quedaron en panne y debieron abandonar el vehículo.

Villca señala que el hermano de Díaz le confesó que su plan había sido robarse la camioneta ya que necesitaba dinero porque había salido recientemente de la cárcel.



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