Los habitantes de Chaitén recibieron durante dos semanas a 90 jóvenes del "Desafío Levantemos Chile", que los visitaron para desarrollar un operativo dental, reconstruir un sendero turístico, hermosear el acceso norte a la comuna y por sobre todo, compartir con los habitantes de la comuna.
Y es que la vida para los habitantes de la comuna no es fácil, a las condiciones naturales de aislamiento, después de la erupción de 2008 se les sumaron la falta de viviendas y un acceso limitado a la salud.
"Es un Chile muy distinto al que sale en los diarios y en las revistas internacionales, es el Chile de la pobreza, de los campamentos de Chaitén por ejemplo y en ese sentido creemos que somos los jóvenes a transformar esta realidad", dice uno de los voluntarios.
Los jóvenes trabajan en promedio 12 horas diarias, intentan minimizar los recursos que gastan en comida y se duchan con agua fría, pero a cambio reciben la ayuda y colaboración de mujeres de la comuna que demuestran así su agradecimiento.
Revisa todos los detalles, en la crónica de Marta Escalona.