La noche de este martes, 46 jóvenes chilenos de la Selección nacional de Cheerleaders partieron a Orlando (Estados Unidos) para competir e intentar superar el segundo lugar obtenido el año pasado en el campeonato mundial de esta misma disciplina.
Los jóvenes se pagaron sus pasajes y la estadía. Son muchachos que dedican sus vidas a riesgo de lesiones y carencias personales en este deporte desconocido donde Chile es una potencia. Sin ir más allá, nuestros representantes nunca han bajado de los cinco mejores lugares, a lo largo de nueve años de participación.
Los jóvenes deberán demostrar en poco más de dos minutos todo lo que entrenaron durante el último año. Quienes lo practican consideran que es una de las actividades físicas más completas que existen.
Yamile Castro, directora del proceso de selección nacional, resume esta actividad en una frase: "Ser cheerleader involucra gimnasia, concentración, flexibilidad y mucha preparación física".