A dos años del terremoto y tsunami que azotó las costas de Japón, una de las zonas más devastadas, el pueblo de Minamisanriku, recibió un regalo muy especial procedente de Chile, un Moai.
El 11 de marzo del 2011, la fuerza de las olas arrasaron con más del 95% de las viviendas del pueblo pesquero, causaron la muerte de 1206 personas y también se llevaron consigo un Moai, que había sido donado por Chile décadas atrás.
Fue justamente este hecho, el que motivó a un grupo de empresarios chilenos a construir y donar un nuevo Moai para Japón, obra que fue esculpida por la familia pascuense Tuki.
Un dato anecdótico, en lengua pascuense Moai significa:escultura y en japonés: mirada al porvenir.
Conoce todos los detalles de esta historia, en la crónica de Mauricio Bustamante.