Los ataques aéreos israelíes contra objetivos en la Franja de Gaza continuaron durante la noche del viernes y dejaron tres muertos, de acuerdo a trabajadores médicos y testigos.
Los ataques se produjeron después de que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que la organización islamista Hamas pagaría un alto precio por la muerte de un niño israelí de 4 años que murió en un ataque con morteros lanzados desde Gaza el viernes.
Más de 2.000 palestinos, la mayoría civiles, han muerto en la ofensiva israelí que comenzó a principios de julio.
En el lado israelí, 67 personas murieron, la mayoría soldados.