La Confederación de Fútbol de Brasil prohibió los partidos en el estadio de la nordestina ciudad de Recife después de que un hombre muriera por el lanzamiento de un inodoro por fanáticos rivales.
Los enfrentamientos registrados en un partido de la segunda categoría el viernes llevaron a las autoridades a cerrar el estadio Arruda hasta que un tribunal deportivo resuelva el caso.
Recife recibirá cinco encuentros del Mundial, aunque se jugarán en el recién construido Arena Pernambuco.