Las autoridades de Corea del Norte aseguraron haber capturado un agente de inteligencia surcoreano. Seúl negó tajantemente que fuera cierto.
Pyongyang acusa al supuesto espía de contactar con "elementos deshonestos", como se refiere a disidentes norcoreanos.
El gobierno norcoreano asegura que el supuesto agente del Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur, que dice llegó al país haciéndose pasar por misionero, confesó durante un interrogatorio.
Desde Corea del Sur, el Ejecutivo niega los hechos y descarta que sus vecinos del norte hayan capturado a un agente suyo.
Las relaciones entre ambos países, que continúan siendo formalmente enemigos desde la guerra que los enfrentó entre 1950 y 1953, se encuentran estancadas después de que hace meses hubiera aparentes gestos de acercamiento.