El encuentro entre el canciller ruso, Sergei Lavrov, y su homólogo John Kerry, fracasó en su objetivo de lograr un acuerdo para resolver la crisis en Ucrania.
Lavrov aseguró que Moscú respetará el resultado del referendo de Crimea, que se celebrará este domingo.
Al salir de su encuentro con Kerry en Londres, Lavrov calificó la reunión de "constructiva" pero dijo que no existe una visión común sobre cómo se debe actuar.
Dijo que Moscú respetará el resultado del referéndum de Crimea, que se celebrará este domingo.
En él la población local decidirá si quiere permanecer como territorio ucraniano o formar parte de la Federación Rusa.
Washington y sus aliados europeos insisten en que la intervención rusa en Ucrania y el referendo en Crimea son ilegales, pero Rusia responde que no puede ser considerada como la agresora debido a que la crisis fue generada en Kiev por un golpe de Estado contra un presidente democrático.
El encuentro se consideraba la última oportunidad para alcanzar un acuerdo antes del referendo.