En un apasionado discurso Hillary Clinton dijo algo de lo que luego se arrepintió.
La candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos se disculpó por llamar a la mitad de los partidarios de Donald Trump personas "deplorables".
No obstante, lanzó un furioso ataque contra su oponente republicano y se comprometió a seguir luchando contra "la intolerancia y la retórica racista".
Trump había respondido diciendo que el comentario era "un insulto" a "millones de increíbles personas que trabajan duro".
Las encuestas de opinión sugieren que Trump le está ganando terreno a Clinton.
Los rivales están empatados en los sondeos de opinión en los estados claves de Ohio y Florida.
Análisis de Anthony Zurcher, corresponsal de la BBC en Estados Unidos
El comentario de Hillary Clinton sobre la "cesta de deplorables", provocó comparaciones inmediatas con Mitt Romney, que en 2012 dijo que aproximadamente el 47% de los estadounidenses que votarían por Obama "creen que son víctimas, que el gobierno tiene una responsabilidad de cuidar de ellos", y la caracterización de Obama en 2008 de que los residentes de zonas pobres de Pennsylvania se aferraban a las armas y la religión.
A diferencia de esas metidas de pata, sin embargo, no está claro cómo las declaraciones públicas de Clinton la dañarán directamente. Ciertamente es poco probable que gane cualquiera de los partidarios de Donald Trump calificando a algunos de ellos racistas o homófobos, y los propios partidarios de Clinton probablemente están de acuerdo con su descripción.
La única pregunta es cómo un sector importante de indecisos ve la controversia.
Lo que Clinton dijo el viernes
Al hablar en un evento de recaudación de fondos en Nueva York, Clinton dijo: "Para simplemente generalizar groseramente, uno puede poner la mitad de los partidarios de Trump en lo que llamo la 'cesta de deplorables' Por desgracia, hay gente así y los ha alentado".
Estos son, dijo en el evento de la comunidad LGBT, "racistas, sexistas, xenófobos, islamófobos - lo que sea".
El resto de los partidarios del candidato republicano, de acuerdo con Clinton, están "simplemente desesperados por un cambio".
Cómo reaccionaron los republicanos
Trump respondió en su cuenta de Twitter: "Guao, Hillary Clinton INSULTÓ TANTO a mis seguidores, millones de personas increíbles y trabajadoras ¡Creo que le va a costar en las urnas!".
Su compañero de fórmula, Mike Pence, respondió: "No son una cesta de nada. Son estadounidenses que merecen su respeto."
El hashtag #CestadeDeplorables se convirtió en tendencia en las redes sociales por la reacción de republicanos indignados, que criticaron a Clinton.
La disculpa de Clinton
Al disculparse, la candidata demócrata dijo: "Anoche fui 'extremadamente generalizadora' y eso nunca es buena idea. Lamento haber dicho la 'mitad'. Eso estuvo mal. Como dije, muchos de los partidarios de Trump son estadounidenses muy trabajadores que simplemente sienten que ni la economía ni nuestro sistema político los está beneficiando".
Sin embargo, en la mayor parte de la declaración, atacó a su rival, acusándolo de construir "su campaña en gran parte sobre los prejuicios y la paranoia" y dando una plataforma nacional de "puntos de vista y voces de odio, incluso mencionando en su Twitter a fanáticos marginales con unas pocas docenas de seguidores y difundiendo sus mensajes a 11 millones de personas ".