La Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), que incluye tanto a Rusia como la Unión Europea, acordó enviar una misión internacional de vigilancia a Ucrania.
En un inicio serán desplegados 100 supervisores en todo el país, incluidas las áreas donde predominan los ciudadanos de origen ruso en el este. Pero no serán enviados a Crimea.
Los países de Occidente esperan que la misión de observadores ayude a reducir las tensiones entre las poblaciones de origen ucraniano y ruso.
Se dijo que la misión podría ser ampliada con otros 400 supervisores.