Rohani prometió reformar la economía, crear empleo y acabar con el aislamiento de su país.
El nuevo presidente de Irán, Hassan Rohani, prestó juramento ante el Parlamento de su país.
La prensa iraní señaló que el mandatario ya hizo su primer nombramiento, eligiendo a un economista graduado en Estados Unidos, Mohammad Nahavandian, como su jefe de gabinete.
El nombramiento es visto por analistas como un indicador de que una de las prioridades de Rohani será reformar la economía.
El sábado el nuevo presidente que sustituye al saliente Mahmud Ahmadineyad recibió el respaldo formal del líder supremo del país, el ayatolá Jamenei.
Rohani prometió una "interacción constructiva con el mundo" tras ocho años de mandato de Ahmadinejad marcados por la confrontación diplomática y las sanciones.
El clérigo moderado de 64 años venció en primera vuelta en junio. Sin embargo, el corresponsal de la BBC para Irán, James Reynolds, asegura que no será él quien tome las principales decisiones, sino que el líder supremo tiene la última palabra.
Ningún presidente de América Latina confirmó su asistencia a la asunción del nuevo presidente de Irán pero Nicaragua, Cuba, Venezuela, Brasil y Ecuador enviaron representantes de alto nivel a Teherán.
Rouhani afronta enormes retos, como combatir la inflación que el mes pasado se estimó en 42%, bajar el alto desempleo y reducir las divisiones políticas entre conservadores, moderados y reformistas.
"Pero los problemas económicos son alarmantes (...) Sobre todo, sin un alivio serio de las sanciones, es difícil ver cómo Rohani puede volver a poner en movimiento la economía", dijo a la agencia EFE Shaul Bakhash, historiador de Irán en la Universidad George Mason en Virginia.
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