Una inesperada y emotiva sorpresa recibió la carabinera Ana Belén Aguilera Casas, quien cayó estrepitosamente desde su caballo en Iquique, por parte del Papa Francisco.
Se trata de un rosario que el sumo pontífice bendijo. Asimismo, le envió especialmente sus deseos de pronta recuperación.
Mientras el máximo líder de la Iglesia Católica saludaba al público en su recorrido por la ciudad, la funcionaria de servicio montado cayó abruptamente desde el animal.
"De repente el caballo se empezó a poner nervioso por la ovación hacia el Papa y se paró de manos. De tal modo preferí tirarme del ejemplar para caer mejor y, así, evitar que quedara alguien más lesionado", relata en su testimonio la efectiva.
La funcionaria de dotación de la Subcomisaría Chinchorro, (Región de Arica y Parinacota) fue atendida por los médicos, quienes tras evaluarla y realizarle los exámenes correspondientes, le dieron el alta.
EL GESTO DEL PAPA
Este accidente fue uno de los momentos más inesperados de la jornada, por lo que Francisco no quedó indiferente frente a esta situación. Tras la caída de la joven uniformada y por orden de él, se detuvo de inmediato la comitiva papal y la máxima autoridad de la Iglesia Católica se acercó al lugar donde la uniformada estaba tendida.
"Al caer al suelo perdí el conocimiento y solo miré hacia arriba. Había mucha gente, paramédicos y en ese momento el Papa Francisco se acerca a decirme que estuviera tranquila, que todo iba a estar bien, me dio un beso en la frente y se retiró", relata.
"Agradezco el gesto del Papa que tuviera esa deferencia de bajarse del papamóvil y poder ayudarme en ese momento", concluye.
La carabinera Aguilera se recupera ahora en una hostal institucional, lugar donde fue visitada por el Jefe de la Primera Zona Tarapacá, General Ricardo Yáñez Reveco, quien junto al cuerpo médico institucional le desearon una pronta recuperación y le llevaron el Rosario que el Papa solicitó se le entregara junto a su mensaje.