Una serie de reuniones, con distintos actores políticos, sostuvo ayer lunes el ministro de Hacienda, Alberto Arenas, para buscar un acuerdo que abra paso a la aprobación de la reforma tributaria.
El secretario de Estado conversó con representantes del oficialismo y la oposición, intentando llegar a consensos para que la iniciativa tenga un respaldo mayoritario en la votación en general que se llevará a cabo este miércoles, en la Comisión de Hacienda del Senado.
Pese a que hubo citas hasta altas horas de la noche, no se logró firmar ningún pacto. Sin embargo, sí se llegó a puntos en común, los que podrían ser ratificados este martes cuando Arenas asista a la comisión ad hoc de la Cámara Alta, que sesiona desde las 11.00 horas.
Según informa La Tercera, La Moneda evalúa modificar el polémico mecanismo de tributación por renta atribuida. En el detalle, se permitiría a los contribuyentes elegir entre dos esquemas para tributar: uno sobre base atribuida (como plantea la iniciativa actual) y otro sobre base percibida. Este último establecería un tratamiento tributario que diferenciaría entre utilidades reinvertidas y retiradas.
Además, el mismo medio indica que Hacienda conversó con RN para elevar a 26% o 27% el impuesto que pagan las empresas, más que el alza de 20% a 25% que establece la reforma original. Esto, teniendo un mecanismo de integración parcial.
La idea del Gobierno es aplicar indicaciones sin tocar el "corazón" del proyecto, es decir, que se mantenga la recaudación de 8.200 millones de dólares y la eliminación del Fondo de Utilidad Tributaria (FUT).