Precisiones sobre el proyecto que crea el Administrador Provisional de Instituciones de Educación Superior entregó este lunes el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre.
Desde el Patio de Los Naranjos, minutos después de que la Presidenta Michelle Bachelet firmara el envío de la iniciativa, Eyzaguirre aclaró que este "interventor" será "un paso intermedio entre cerrar y no cerrar" las universidades.
"No estamos innovando sobre la materia. Ya el Estado tiene la potestad para cerrar una universidad. Lo que estamos pidiendo no es innovar sobre las razones que se puede intervenir, sino que un paso intermedio entre cerrar y no cerrar, que es administrar provisionalmente", puntualizó.
El titular del Mineduc explicó que "es una ley corta para dar solución a estudiantes que eventualmente podrían quedar en la calle". Asimismo, reconoció que será la Superintendencia de Educación Superior -proyecto que aún no se envía- la que actuará de manera preventiva.
Quien ejercerá como "interventor" o "administrador", detalló el secretario de Estado, no podrá tener ningún conflicto de interés con la casa de estudios que va a administrar y deberá presentar experiencia en esta área.
"Idealmente, uno debería tener un registro de potenciales interventores. No obstante, dado la urgencia del tema, no tenemos todavía ese registro", indicó, señalando que cualquier designación se realizará tomando en cuenta los ya mencionados requisitos.
Los motivos que generarán la intervención, en tanto, son que el establecimiento educacional no sea sostenible financieramente, que esté realizando operaciones de lucro u otras irregularidades. Descartado de esa lista quedan las tomas.
La duración del cargo de administrador es de dos años, prorrogable. En caso de subsanarse las deficiencias que motivaron su nombramiento, el Mineduc puede alzar la medida, con acuerdo del CNED.
CRÍTICAS DESDE LA CENTRODERECHA
El diputado del movimiento Evópoli y miembro de la comisión de Educación de la Cámara, Felipe Kast, manifestó reparos al anuncio de La Moneda, cuestionando el "orden" en que se están enviando los proyectos en materia educacional.
"Nuestra gran preocupación tiene que ver con el orden de los proyectos. Nos parece muy extraño que se quiera tener un interventor, cuando todavía ni siquiera tenemos un mecanismo que certifique la calidad a la altura de lo que Chile necesita", expresó.
En la misma línea, Kast indicó que le preocupa que el interventor "tampoco sea arbitrario. Eso significa que queremos un Estado que se haga cargo de exigirle a cada universidad, a cada institución de educación superior, que esté altura de lo que requiere el país.
"Y que no lleguemos simplemente a hacer una medida parche con esta medida, que es simplemente llegar a rescatar una universidad que no estuvo a la altura de las circunstancias", sentenció.