Durante la ceremonia de cambio de gabinete en La Moneda, donde asumió Carolina Schmidt como ministra de Educación, el Presidente de la República, Sebastián Piñera aprovechó para "transparentar los principios que orientan" la reforma educacional.
Así, el Mandatario su sumó al debate sobre el fin al lucro en la educación superior, tema que derivó en la acusación constitucional y posterior destitución de Harald Beyer.
"Lucro significa beneficio, compensación y quiero decir claramente que estamos absolutamente en contra del abuso, de la usura o de las injusticias que se puedan cometer en el sistema educacional", partió diciendo.
Luego, acto seguido, aclaró que "si una institución pública o privada, con beneficio o sin beneficio, no da educación de calidad, tiene que desaparecer. Si una institución da educación de calidad, cumple con las leyes, sea pública o privada, tengan o no tengan un justo beneficio de compensación los que están impulsando esa institución, esta institución está aportando a dar una educación de mejor calidad y equidad".
El Jefe de Estado destacó que la libertad de enseñanza y que no sólo el Estado tiene derecho a "formar escuelas, sino que también la sociedad civil y los ciudadanos tienen derecho a aportar a este importante campo como es la educación".
Piñera acuso que en esta discusión hay una "guerrade eslóganes" que "ocultan la profundidad del desafío educacional".