En la Entrevista del Domingo de TVN el ministro de Salud, Jaime Mañalich, reiteró que importar vacunas desde el extranjero es ilegal e implica un riesgo sanitario que no será tolerado. Las partidas que se descubran en la frontera serán requisadas y destruidas.
“A partir del miércoles enviamos una circular la (dirección de) Fronteras y al SAG para fiscalizar este tema con mayor eficacia y retener la partida de vacunas, las que serán destruidas, porque no pueden ser utilizadas en territorio nacional”, precisó el secretario de Estado.
La inmunidad que produce la vacuna de la meningitis se mantiene activa durante tres años, por eso ya se está estudiando si se incluirá esta cepa en el programa nacional de inmunización del ministerio.
“Tenemos tan pocos casos en Chile que por ahora no parece prudente, pero la respuesta definitiva la tendremos el próximo año”, afirmó Mañalich.
El ministro recordó que la estrategia de vacunación busca proteger a quien recibe la inmunización y a su entorno.
“De los casos registrados en el país, la mitad corresponde a menores de cinco años, que son los que hacen la enfermedad más grave, 10 casos son mayores de sesenta y el resto adultos y jóvenes, que hacen una enfermedad más leve. Esta campaña se ha focalizado en niños con mayor tasa de enfermedad, que es el grupo menor de 5 años, por eso cuando bloqueamos a estos niños, estamos protegiendo a todos la población”, afirmó.
Mañalich también explicó que no se vacuna a menores de nueve meses porque la industria farmacéutica no ha logrado desarrollar una vacuna que sea efectiva y hasta ahora la que existe es una vacuna inactiva para esos niños.
VACUNACIÓN PRIVADA
La autoridad de salud también informó que el Instituto de Salud Pública (ISP) está analizando unas 8 mil vacunas que han sido importadas por clínicas privadas, por lo que de ser aprobadas, estarán disponibles para la venta a quienes la requieran para inmunizar a personas fuera del rango de edades incluido en la vacunación gratuita del Estado.
Sin embargo, el ministro de Salud llamó a no comprar vacunas ni a vacunarse en farmacias, porque no existe control sobre la cadena de frío que debe acompañar el transporte, almacenamiento y administración de las dosis.
En cuanto al precio que puede alcanzar en el sector privado cada dosis, el ministro Mañalich acusó especulación por parte de las clínicas, las que están sacando un margen cercano al 50 por ciento adicional desde que se encendió la alerta por la cepa W-135.
“Yo lo llamaría especulación y por eso nuestro llamado es denunciar esta conducta, cada vez que hay aumento de necesidad, los márgenes son claramente especulativos”, afirmó. Y como las vacunas son bien un público y son gratuitas para quienes lo necesiten, “sería una buena idea que las Isapres pagaran un poco más los costos en salud”.
UTILIDADES DE LA INDUSTRIA
El secretario de Estado aprovechó de hacer una crítica al funcionamiento de la salud privada en el país, que obtiene utilidades millonarias cada año.
“Todos estamos obligados a cotizar un 7 % para salud (…) cuando se está obligado y una parte sustantiva se retira como utilidad, uno dice que hay algo que no está funcionando”, sostuvo Mañalich, quien insistió en avanzar rápido en la reforma a la salud para corregir estos vicios.
“Los colegisladores hemos sido indolente en este tema, no hemos resuelto el problema (…) Tenemos además un tema de híper judicialización que es vergonzoso (…) debemos ponerle discusión inmediata a la ley que garantiza un plan de salud”, afirmó.
OFERTA SENATORIAL
En el ámbito político, el ministro de salud reconoció que tanto desde Renovación Nacional (RN), como desde la Unión Demócrata Independiente (UDI), los presidentes de ambos partidos le ofrecieron ir como candidato a senador, ofrecimiento que rechazó porque aceptarlo habría significado quitarle el cupo a un senador en ejercicio.
“Cuando me dicen que debía competir con otro senador, con el cuál he establecido un vínculo de amistad, con el que hemos trabajado temas de salud en conjunto, entonces dije por ningún motivo”, afirmó.
Además explicó que su compromiso con el presidente Sebastián Piñera es seguir como ministro de salud hasta que termine su mandato o hasta que el mandatario lo estime conveniente.
Respecto al futuro candidato del oficialismo a La Moneda, Mañalich dijo ser cercano tanto a Laurence Golborne como a Andrés Allamand, pero que solo tomará partido por uno u otro cuando conozca el plan de gobierno de cada uno para su sector.