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"Lobos en la Catedral": Informe Especial destapa las denuncias por abuso contra el padre Tito Rivera

Un hombre en situación de calle asegura haber sido drogado y violado por el religioso en 2015, quien además cuenta con denuncias por sustracción de artículos religiosos.

24Horas.cl Tvn

Domingo 10 de marzo de 2019

En un capítulo extraordinario emitido la noche de este domingo, Informe Especial detalló las denuncias por abuso sexual y robo de artículos religiosos que existen en contra del sacerdote católico Tito Rivera.

Uno de los testimonios pertenece a un hombre adulto en situación de calle, quien denunció que en 2015 fue violado por un sacerdote en la Catedral de Santiago.Informe Especial accedió al testimonio exclusivo del denunciante, identificado como Zoro Daniel Rojas Álvarez (43), quien no registra antecedentes penales, está divorciado y tiene tres hijos.

Actualmente, el padre Rivera está aquejado de diversas enfermedades como mal de Parkinson, cáncer a la próstata, diabetes y problemas renales. Un equipo liderado por Santiago Pavlovic lo fue a visitar a su casa para intentar conocer su versión sobre los hechos y corroborar su actualidad. Sin embargo, el cura optó por el silencio y pidió que su abogada se haga cargo de realizar los descargos correspondientes.

La jurista niega tajantemente que haya habido violación por parte del acusado, el cual fue ordenado sacerdote en San Felipe, se desempeñó como capellán de Carabineros por 14 años, luego párroco en Santiago, capellán en la Catedral y desde marzo de 2015, rector en la Iglesia de Las Agustinas.

EL RELATO DE LA VÍCTIMA

De acuerdo al relato de la supuesta víctima, en 2015 pidió ayuda en la Catedral para comprar un medicamento para su hija, afectada por una enfermedad urinaria. Fue ahí cuando se cruzó con el padre Tito, quien le dijo que lo ayudaría llevándolo a una pieza al interior del segundo piso del recinto ubicado en el corazón de Santiago, a un costado de la Plaza de Armas.

Según Daniel, ya sentado en la cama de la habitación bebió un vaso de agua que le ofreció el cura, quien a su vez entró al baño. Mientras esperaba, el denunciante declara haberse sentido "sin fuerzas".

Tras esto, el religioso volvió. Fue ahí cuando luego de bajarse los pantalones y de hacer lo mismo con su supuesta víctima, le practicó sexo oral y además lo violó. "Mi cuerpo no reaccionaba, me sentía cochino (...) Hasta el día de hoy me cuesta dormir", cuenta entre lágrimas Rojas, añadiendo que tras esto el religioso le pidió que no revele lo sucedido a nadie.