Su voz ha traspasado fronteras.
Su talento la ha llevado a grandes escenarios.
Y su solidaridad una vez más se puso a prueba. Esta vez en Magallanes.
Daniela Castillo fue una de los artistas nacionales que llegó a cuadrarse con la obra del Padre Alberto Hurtado.
El humor, los concursos y sorteos, fueron la fórmula del éxito de esta nueva cena Pan y Vino. Tradición que permite recaudar fondos y captar socios para continuar la obra del Hogar de Cristo.
Treinta años cumplió esta iniciativa, una que exige generosidad, apoyo y constancia. Recursos básicos que permiten que al menos en la región, más de 500 personas puedan ampararse en el legado de quien instauró el lema que hay que dar hasta que duela.