Es un beneficio que entrega el gobierno a magallánicos de escasos recursos que cursen estudios universitarios en otras regiones del país. La idea era apoyarlos con dos pasajes aéreos al año, pero no todos eran ocupados. La iniciativa apuntaba a los quintiles más bajos, pero a partir de este año se ampliará su cobertura.
Estudiar en una de las universidades del centro o norte del país es una de las metas de muchos jóvenes magallánicos, pero implica mayores costos. El gobierno beneficia a estudiantes de escasos recursos que cursen estudios universitarios o técnicos fuera de la región, ahora existirá mayor cobertura.
En total serán 2.429 universitarios de Chiloé, Aysén y Magallanes que recibirán el beneficio. Una medida que busca que el aislamiento no sea una limitante en sus estudios.