No es un ejercicio que hacemos muy a menudo, porque la costumbre nos va dejando un poco quietos. Sin embargo cuando le preguntamos a un magallánico, por los costos de la vida en la región, o a un coterráneo que vive en otro lugar de Chile, y que está de vuelta en Punta Arenas, la respuesta es siempre la misma. En Magallanes la tranquilidad y seguridad tienen un alto precio.
Un Magallánico necesita a lo menos 5.990 pesos para comprar una sandía y eso, si la encuentra en oferta. Por lo mismo, es normal, comprarla por trozos.
Estamos a 4 días de los abastecedores y eso siempre y cuando los camiones no tengan obstáculos en Argentina, por donde deben pasar, para llegar a Punta Arenas.
Otro de los altos costos de la vida en Magallanes se ve reflejado en el precio de los combustibles.
El costo de la vida en Punta Arenas, donde el sueldo mínimo es el mismo que en el resto del país, se ve también incrementado por los valores de las casas. Arrendar o comprar una de ellas, se ha convertido en un dolor de cabeza, por los altos precios y la poca oferta.
Finalmente y con estos ejemplos, queda en evidencia que vivir en esta encantadora tierra, requiere de muchos esfuerzos.