Nadie está libre de sufrir algún accidente cuando está arriba de un automóvil. La prudencia ya no es una característica que lo pueda hacer escapar de una desgracia.
Es por esta razón que la ley 18.490 establece que todos los propietarios de algún vehículo deben tener el seguro obligatorio que cubrirá los gastos al conductor o a terceros involucrados en caso de accidente.
Este seguro no opera en carreras de automóviles, tampoco en accidentes autoinferidos y en ningún caso en un incidente fuera del territorio nacional. Aún así, tenerlo es uno de los requisitos principales al momento de obtener el permiso de circulación.
De una u otra forma este seguro es obligatorio y las maneras de obtenerlo están a la mano. Ahora sólo queda acercarse, obtenerlo y así cubrir cualquier eventualidad que le pueda suceder sobre ruedas.