Diez de la mañana con 47 minutos. A pocos instantes de iniciar la atención al público. De pronto un apagón. Un simulacro de incendio en la tienda Ripley del Mall gatillaba la evacuación de los trabajadores. En masa salieron desde su lugar de trabajo por la puerta de emergencia. Así llegaban a los estacionamientos.
En pocos minutos bajaron hacia la zona segura. Poco importó la nieve. Se tomaron el simulacro con seriedad. Los funcionarios no sabían que era una situación ficticia.
Positiva evaluación del simulacro. Eso sí, hay cosas que mejorar. Ahora estos funcionarios están más preparados para una emergencia real, ya saben a dónde dirigirse y cómo evacuar su lugar de trabajo.