Con trabajos de limpieza a cargo del Departamento de Aseo y Ornato, sumado al voluntariado que realizan estudiantes, el Municipio intenta combatir los basurales clandestinos. Pero qué pasa cuando los desechos son arrojados en un terreno privado que está en abandono. Es la situación que viven los vecinos del sector de Leñadura en Punta Arenas. Temen problemas sanitarios.
Un cartel que aquí sólo parece estar de adorno. Caso omiso se ha hecho a la instrucción de la señalética. Donde antes había una pesquera en el kilómetro 7 sur en Leñadura ahora la basura abunda. Electrodomésticos, muebles, computadores, artículos de construcción, hasta un auto en abandono.
Quien sea sorprendido arrojando basura puede recibir una multa de hasta $423.000. Así lo establece la ordenanza de Aseo que el año 93´ entró en vigencia en Punta Arenas.
Pero quién se hace cargo de la limpieza del terreno. En el Conservador de Bienes Raíces figura a nombre de la pesquera Valmar y Compañía, propiedad de Carlos Valladares Marangunich. Vecinos pueden denunciar casos como este -incluso de manera anónima- en la oficina de Informaciones, Reclamos y Sugerencias (OIRS) ubicada en el edificio bioclimático de la Seremi de Salud.
Un terreno en un sector rural que colinda con el Estrecho de Magallanes. Pero que producto de la irresponsabilidad y de la basura, hoy muestra esta vista de Punta Arenas.