Los municipios serán los encargados de retirar la propaganda que aún permanece en las calles, pasado el costo de la maniobra a los comandos de los candidatos, sean ganadores o perdedores, por la presencia de carteles y muros pintados.
La ley establece que los comandos tenían hasta el 31 de octubre para retirar la propaganda electoral en forma autónoma. Sin embargo eso no ha ocurrido, así que ahora los ciudadanos pueden denunciar la presencia de propaganda a Carabineros, y ellos informarán las multas a los Juzgados de policía local.