Episodios de malos olores ocurridos en junio y julio y que afectaron a la población el Triangulo de Hualpén es lo que investigó y sancionó el Ministerio de Salud.
Las multas alcanzaron los 51 millones de pesos, aunque la refinería se reservó el derecho de apelar.
“Las emanaciones fueron molestas, pero no representan un riesgo permanente para la salud de quienes resultaron afectados”, explicó el seremi de salud del Biobío, Boris Oportus.
Ahora queda pendiente un nuevo sumario. Esta vez a raíz de denuncian de quienes viven en las inmediaciones de la planta, quienes denuncian contaminación acústica a raíz del funcionamiento de las instalaciones.