Las condiciones climáticas adversas y una visibilidad de sólo algunos metros a más de 20 metros de profundidad, han dificultado el trabajo de búsqueda de la avioneta que desapareció el pasado 6 de octubre, cuando viajaba desde Isla Mocha a Tirúa, con cinco personas a bordo.
Los buzos de la Armada y la PDI esperan revisar un sitio a 18 kilómetros de la isla, donde una embarcación enredó sus redes en el fondo marino, sin poder liberarlas. Es la principal pista para ubicar restos de la avioneta, como los que aparecieron el pasado fin de semana, y que están siendo analizados, como presuntas partes del Cessna.