Cerca de las 6 de la mañana un grupo de 4 o 5 delincuentes llegó hasta la sucursal del banco Scotiabank en el centro de Chillán. Ataron un cajero automático a una camioneta y lo arrancaron, pero el cable se cortó. El dispensador quedó en la vereda. El vehículo encargado por robo en Concepción fue abandonaro en un lugar cercano. Los miguelitos que lanzaron al huir provocaron molestias a más de un conductor.