320 internos de los módulos de media y alta peligrosidad de la cárcel El Manzano fueron registrados y allanadas sus celdas tras un procedimiento que fue dirigido por más de cien efectivos especiales de gendarmería junto al equipo de perros adiestrados. Resultado, teléfonos celulares, armas blancas como estoques fabricados por los internos y equipos para cargar celulares construídos por ellos. 26 condenados fueron sancionados y están aislados por 24 horas del resto de la población penal.