Un paro de advertencia realizaron la mañana de este miércoles agrupaciones de funcionarios penitenciarios. Todos pertenecen a la cárcel El Manzano y el Complejo Biobío. La gatillante del conflicto fue exigir el aumento de dotación en al menos 80 nuevos profesionales para toda la región y no los 26 que les informaron. Como una medida de presión tres gendarmes iniciaron una huelga líquida.