Cerca de 200 manipuladoras de alimentos de la región del Biobío aprovecharon las vacaciones de invierno para marchar por las calles de Concepción, en demanda de un alza en sus remuneraciones, reconocimiento de beneficios y mejoras en los sitios donde les toca laborar, aparte de exigir que la ley de enfermedades laborales las incluya, a la hora de entregar bonificaciones.
Tienen conversaciones avanzadas con parlamentarios, para que sus demandas sean incluidas en una ley.