Aún los vecinos ni los afectados se explican como una grúa pluma terminó destruyendo la casa. El chofer de la máquina dice quese le cortaron los frenos y perdió el control de la grúa. Afortunadamente no había moradores, de milagro los niños que viven en la casa no estaban en el living destruido, donde habitualmente ven televisión.
La grúa pluma cuenta con seguro por lo que los afectados esperan que se les repare a la brevedad el daño material causado a la vivienda.